(El País, 14-10-2024) | Mercantil, civil y administrativo
Decenas de miles de personas, entre 22.000 según la Delegación del Gobierno y 150.000 según los organizadores, se han manifestado en Madrid para exigir una reducción en los precios del alquiler, advirtiendo que "no hay suficientes policías, jueces ni matones" para desalojarlos si dejan de pagar. Casi 40 organizaciones, partidos de izquierda y colectivos de la sociedad civil han respaldado la protesta, bajo los lemas "La vivienda es un derecho, no un negocio" y "Se acabó. Bajemos los alquileres".
Entre los convocantes destacan plataformas como Afectados por la Línea 7B de Metro, Afectadas por la Vivienda Pública y Social (PAVPS) y la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH). El precio del alquiler en Madrid ha subido un 15,7% desde septiembre de 2023, según el portal inmobiliario Idealista.
Durante la marcha, que recorrió desde la plaza del Emperador Carlos V hasta la Gran Vía, se escucharon consignas como "La Ley de vivienda es una basura", "No toleramos ni un desahucio más" y "Abajo el rentista, arriba el inquilino". Los organizadores explicaron que su intención es dar inicio a un "proceso de movilización social más amplio y sostenido en el tiempo" en torno a la problemática de la vivienda.
La protesta, organizada desde mediados de septiembre, contó con la cobertura de medios tanto nacionales como internacionales, pero no asistieron representantes del Gobierno estatal, ni de los ejecutivos regionales o municipales de Madrid.
Valeria Racu, portavoz del Sindicato de Inquilinos e Inquilinas de Madrid, lanzó una advertencia tanto a los propietarios como a las empresas inmobiliarias, amenazando con dejar de pagar los alquileres si los precios continúan subiendo. Según Racu, "no habrá suficientes policías ni matones" para detener a todas las personas movilizadas en este propósito.
El objetivo de la huelga, según explicó Racu, es reducir los alquileres en un 50%. Para ello, se hace un llamamiento a organizarse en todos los barrios de España a partir del lunes 14 de octubre. Por su parte, Paloma López Bermejo, secretaria general de CCOO Madrid, instó a la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, a regular los pisos turísticos, acusándola de "dejación de funciones".
CCOO Madrid también subrayó las dificultades de los jóvenes para emanciparse en la Comunidad, señalando que "no pueden acceder a una vivienda de alquiler, a una vivienda social o a un parque de viviendas públicas". Los partidos Más Madrid y el PSOE también participaron en la manifestación, lanzando críticas al Ayuntamiento de Madrid y al Gobierno regional.
Rita Maestre, portavoz de Más Madrid en el Ayuntamiento, calificó la protesta como un "punto de inflexión" para abordar la "crisis de vivienda", que consideró el principal problema de los madrileños. Por su parte, Mónica García, portavoz de la formación en la Asamblea, advirtió que los altos precios del alquiler están afectando gravemente a la región: "Están devorando el presente y el futuro de los madrileños. Es una situación insostenible", y exigió el cierre de los pisos turísticos ilegales.
Finalmente, Reyes Maroto, portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid, instó al alcalde José Luis Martínez-Almeida a no "hacer la vista gorda" y a aplicar la Ley de Vivienda aprobada por el Gobierno central.