(El Periódico, 16-10-2024) | Mercantil, civil y administrativo
El Índice de Precios de Consumo (IPC) descendió un 0,6% en septiembre respecto al mes anterior y redujo su tasa interanual en ocho décimas, situándose en el 1,5%, el nivel más bajo desde marzo de 2021, cuando alcanzó el 1,3%. Estos datos, publicados este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), coinciden con los adelantados a finales del mes pasado.
El INE ha señalado que la moderación del IPC hasta el 1,5% se debe a la bajada de precios de los carburantes, la electricidad, los paquetes turísticos y los alimentos, cuya tasa interanual cayó siete décimas, alcanzando el 1,8%, su nivel más bajo desde octubre de 2021.
La reducción en los precios de los alimentos fue principalmente impulsada por la caída de los precios de los aceites y grasas, y en menor medida por el abaratamiento de las frutas y un incremento más leve en los precios de legumbres y hortalizas en comparación con septiembre de 2023.
Con esta caída del IPC interanual, la inflación acumula cuatro meses consecutivos de descenso, tras los aumentos registrados en marzo, abril y mayo que llevaron al IPC al 3,6%. La inflación subyacente, que excluye alimentos no elaborados y productos energéticos, bajó tres décimas en septiembre, quedando en 2,4%, nueve décimas por encima de la tasa general y siendo la más baja desde enero de 2022.
El Ministerio de Economía destaca que la inflación se ha reducido significativamente en septiembre, con una caída de ocho décimas hasta el 1,5%, el nivel más bajo de los últimos tres años y medio (desde marzo de 2021), quedando por debajo del umbral de referencia del Banco Central Europeo. Además, subraya la notable reducción de los precios de los alimentos, con una bajada de siete décimas en la tasa interanual, situándose en 1,8%, el nivel más bajo desde octubre de 2021. En particular, en septiembre destacó la bajada del precio del aceite, con una reducción del 2,2%.
El Ministerio resalta que esta bajada constante de la inflación demuestra la capacidad de la economía española para combinar un mayor crecimiento económico, situándose entre los más altos de los principales países de la zona euro, con una moderación en los precios. Los datos de crecimiento del PIB del segundo trimestre confirman que la economía española creció cuatro veces más que la media de la zona euro. Estos factores, junto con la mejora del mercado laboral y los salarios, están contribuyendo a mejorar el poder adquisitivo de los ciudadanos y la renta real de los hogares.
En septiembre, el Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) registró una tasa interanual del 1,7%, lo que supone una disminución de siete décimas respecto a agosto. La variación mensual del IPCA fue del -0,1%. El Ministerio de Economía también destaca la significativa bajada de los precios de los carburantes y la electricidad en este mes. En términos mensuales (comparado con agosto), el IPC bajó un 0,6%, lo que representa su mayor descenso mensual en dos años, desde septiembre de 2022.
En la variación mensual influyeron principalmente las caídas en los precios de los paquetes turísticos, los carburantes, el transporte aéreo de pasajeros y la electricidad. En contraste, los precios del vestido y el calzado aumentaron un 2,4% con el inicio de la temporada de otoño-invierno.
El Ministerio de Economía ha subrayado la reducción del precio del aceite en septiembre, con un descenso del 2,2%. "Esta bajada continuada está permitiendo que la inflación de los alimentos se acerque al índice general, gracias a las medidas de apoyo adoptadas", afirmó el departamento dirigido por Carlos Cuerpo.
Finalmente, el Ministerio remarca que la reducción sostenida de la inflación refleja la capacidad de la economía española para mantener un fuerte crecimiento en comparación con otros países de la zona euro, al mismo tiempo que modera los precios, y destaca que esta evolución, junto con la mejora del empleo y los salarios, está ayudando a mejorar el poder adquisitivo y la renta de los hogares.