(Cinco Días, 23-10-2024) | Mercantil, civil y administrativo
Las entidades financieras están intensificando sus esfuerzos para captar nuevas nóminas en un momento en que los tipos de interés están en descenso y los productos de ahorro tradicionales, como las cuentas remuneradas y los depósitos, pierden atractivo. En este contexto, los bancos ofrecen incentivos en efectivo que oscilan entre los 200 y 400 euros a quienes domicilien sus ingresos.
Openbank es la última entidad en unirse a esta estrategia, ofreciendo 250 euros por domiciliar una nómina de al menos 900 euros. Sin embargo, la mayoría de los bancos españoles ya cuentan con promociones similares. BBVA, Santander y Unicaja lideran esta tendencia con incentivos de hasta 400 euros, aunque con diferentes condiciones. BBVA exige una nómina mínima de 800 euros y una permanencia de 12 meses, mientras que Santander requiere 2.500 euros y Unicaja 2.000 euros. Otros bancos como Abanca, Deutsche Bank y Sabadell ofrecen entre 300 y 370 euros, mientras que entidades como CaixaBank, Imagin, Cajamar, Kutxabank e ING ofrecen entre 200 y 250 euros.
Santander destaca por ofrecer hasta 550 euros en total, sumando bonificaciones adicionales para colectivos específicos, como funcionarios o empleados de Mapfre, y por contratar productos adicionales, como seguros o fondos de inversión. Por su parte, Cajamar y Kutxabank ofrecen incentivos aún mayores para nóminas más altas, llegando hasta 500 y 600 euros respectivamente.
A pesar de que los grandes bancos inicialmente evitaron una "guerra del ahorro" cuando el Banco Central Europeo comenzó a subir los tipos de interés, ahora se enfocan en captar nóminas, ya que esto les resulta más beneficioso. Cuando un cliente domicilia su nómina, es más probable que lo utilice como banco principal, lo que facilita la venta de productos adicionales y genera ingresos recurrentes para la entidad.
Las promociones para atraer nuevas nóminas también garantizan un flujo estable de ingresos durante varios años, ya que los bancos imponen condiciones de permanencia que varían desde los 12 meses en entidades como BBVA, Sabadell y Openbank, hasta los 48 meses en Imagin. ING, sin embargo, solo exige una permanencia de tres meses.
Históricamente, cambiar de banco era un proceso complejo, pero desde 2019 las entidades están obligadas a facilitar el traslado de cuentas de forma gratuita y sencilla. Aunque al principio surgieron algunos problemas, el Banco de España ya los ha corregido y el proceso debe completarse en un máximo de 13 días hábiles. Esto incluye la migración de servicios como recibos y transferencias, aunque no el número de cuenta.
Además de los incentivos directos por domiciliar la nómina, algunos bancos han implementado promociones adicionales, como bonificaciones por recomendar amigos o reembolsos por el pago de recibos. También se ha extendido la práctica del cashback por compras con tarjeta, una estrategia que ha ganado popularidad en España y que beneficia tanto a los clientes como a las entidades.