(El País, 22-11-2024) | Fiscal
El informe Revenue Statistics 2024 ofrece también una visión detallada de la estructura tributaria de los países miembros de la OCDE, destacando la proporción que cada tipo de impuesto representa en relación con el total de la economía. Aunque han ocurrido algunos cambios en el largo plazo, la configuración general de los sistemas fiscales ha permanecido relativamente estable. Las cotizaciones sociales y el impuesto sobre la renta continúan siendo las principales fuentes de recaudación respecto al PIB, seguidas por el IVA, según datos de 2022.
El impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF), que es el más relevante en varios países, incluyendo España, representó en promedio el 23,6% de los ingresos totales en la OCDE, ligeramente por debajo del 24,1% registrado en el año 2000. Este descenso se atribuye, en parte, a la incorporación de nuevos miembros, principalmente de Europa del Este y América Latina, cuyos sistemas fiscales generan menos ingresos por renta y para los cuales no se dispone de datos completos en las series históricas. En términos de PIB, el peso del IRPF bajó del 8,5% en 2010 al 8,2% en 2022, mientras que los ingresos por el impuesto de sociedades pasaron del 3,1% al 3,9% del PIB en el mismo periodo.
En el caso de España, la situación presenta algunas diferencias. Los ingresos por IRPF representan un 9,1% del PIB, casi tres puntos más en comparación con el año 2000 y por encima del promedio de la OCDE. Sin embargo, el impuesto sobre sociedades muestra una ligera caída, pasando del 2,8% al 2,7% del PIB, situándose por debajo de la media del bloque.
Las cotizaciones a la Seguridad Social representan el 24,8% de los ingresos fiscales en la OCDE. España se distingue como uno de los países donde las empresas asumen una mayor parte de esta carga, junto con Estonia y la República Checa: las contribuciones de los empleadores alcanzan el 25,2% del total de ingresos fiscales y un 9,5% del PIB. Los impuestos al consumo han incrementado su relevancia, pasando de cerca del 12% al 21,4% del total de la recaudación, siendo el IVA el principal protagonista. Este impuesto representó en 2022 el 20,8% de la recaudación total y el 7% del PIB, una cifra que coincide con la registrada en España.