(El Periódico, 09-01-2025) | Mercantil, civil y administrativo
Tres de cada diez personas ya utilizan dispositivos móviles para realizar pagos en comercios y restaurantes, y una de cada diez los considera su método principal. Según el último informe del Banco de España sobre el uso del efectivo, el porcentaje de personas que optan por alternativas digitales sigue creciendo desde la pandemia. En el último año, este cambio ha sido impulsado principalmente por el auge de los dispositivos móviles y de servicios de pago instantáneo como Bizum, cuya popularidad continúa en aumento.
Aunque el efectivo sigue siendo el medio más utilizado en los puntos de venta, su uso ha disminuido significativamente. Según el "Estudio sobre las actitudes de pago de los consumidores en la zona euro" del Banco Central Europeo (BCE), en los últimos ocho años las transacciones en efectivo han pasado de representar nueve de cada diez pagos a solo seis.
La edad influye notablemente en las preferencias de pago. Las personas menores de 36 años tienden a combinar el uso de tarjetas y dispositivos móviles, mientras que quienes tienen más de 55 años prefieren los billetes y monedas, principalmente por costumbre. Según el informe del Banco de España, el efectivo sigue siendo preferido en sectores como el de la alimentación y para compras de menor importe.
A pesar de ello, el uso del efectivo continúa disminuyendo. La Confederación Española del Comercio (CEC) señala que las operaciones realizadas a través de terminales de punto de venta (TPV) crecieron un 10% hasta septiembre de 2024 respecto al mismo periodo del año anterior. En 2023, se alcanzaron cifras récord con 8.406 millones de operaciones realizadas con tarjeta a través de TPV, por un total de 255.458 millones de euros. Aunque el número de operaciones casi se ha triplicado desde 2016, el importe total solo se ha duplicado, reflejando que las tarjetas se usan cada vez más para compras de bajo valor.
Este cambio de hábitos ha llevado a los comercios a adaptarse a la nueva realidad. Según la CEC, menos del 0,5% de los establecimientos no aceptan tarjeta, aunque en hostelería esta cifra asciende al 15%, según el Banco de España. Además, cada vez son menos los comercios que imponen un importe mínimo para aceptar pagos con tarjeta.
El uso del teléfono móvil ha potenciado aún más los pagos digitales. Datos de CaixaBank revelan que en el primer semestre de 2024, el 30% de las compras presenciales realizadas con sus tarjetas se efectuaron a través del móvil. Entre los jóvenes de 18 a 24 años, el móvil es el medio más utilizado, con un 35% de las transacciones, frente al 26% que emplea tarjetas. La comodidad es el principal argumento para siete de cada diez usuarios que prefieren este método.
España destaca en Europa por su capacidad de innovación en métodos de pago, según fuentes del sector financiero. En 2012, CaixaBank fue pionera al implementar la tecnología contactless, cuando aún era desconocida en el continente. Este avance impulsó la llegada a España de sistemas de pago móvil de empresas como Samsung y Apple antes que a otros países.
Estos desarrollos facilitaron la aparición, en 2014, de productos como la primera aplicación del mundo para relojes inteligentes (smartwatch) y la primera pulsera Visa contactless. Actualmente, las entidades financieras, en colaboración con empresas tecnológicas, promueven la adopción de nuevos wearables para realizar pagos, como relojes y anillos.