(Expansión, 10-10-2024) | Fiscal
El Gobierno allanó ayer el camino para implementar subidas de impuestos que podrían alcanzar los 60.000 millones de euros. Tanto el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, como la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, mencionaron en sus intervenciones en el Congreso de los Diputados que España mantiene una "brecha fiscal" de cuatro puntos del PIB respecto a la media de la Unión Europea, una diferencia que, según Montero, la Comisión Europea exige cerrar mediante una reforma fiscal. Esto representa un claro aviso, justo una semana antes de que el Ejecutivo deba enviar a Bruselas, el próximo martes, el Plan Fiscal Estructural que exige la normativa fiscal europea, en el que se detallarán las medidas para corregir los excesos de déficit y deuda pública acumulados por el Estado.
Ayer, Sánchez compareció ante el Pleno del Congreso, a petición del Partido Popular, con el objetivo de explicar tanto la política migratoria del Gobierno como los ajustes necesarios para cumplir con las recomendaciones de la Comisión Europea y someter a votación el Plan de Equilibrio Fiscal. Sin embargo, en su discurso inicial, que duró casi una hora, no mencionó dicho plan, lo que provocó críticas por parte de la oposición.
Alberto Núñez Feijóo, líder del PP, reprochó a Sánchez que "se está ocultando información" sobre el documento, calificándolo como "el más importante que España firmará para los próximos siete años", y recordó que la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) ha estimado que el ajuste necesario para cumplir las normas fiscales podría rondar los 39.000 millones de euros.
En respuesta, Sánchez confirmó que el Gobierno presentará un "Plan Fiscal Estructural" para adaptarse a las nuevas restricciones presupuestarias de la UE, destacando que el documento incluirá "compromisos de responsabilidad en el gasto, pero también nuevas inversiones para el futuro", asegurando además que "no habrá recortes". Añadió que "España está cumpliendo con los objetivos de déficit público y, por primera vez en más de una década, ha salido del procedimiento de déficit excesivo gracias a la política económica y social de este Gobierno". Además, subrayó que España tiene cuatro puntos menos de presión fiscal que la media europea.
Montero, por su parte, fue más explícita en su intervención, respondiendo a la portavoz del PP, Cuca Gamarra, quien acusó al Gobierno de "asfixiar a los ciudadanos, familias y empresas con impuestos". Montero replicó que "en relación con la brecha fiscal, estamos cuatro puntos por debajo de la presión fiscal europea, y Europa exige al Gobierno una reforma fiscal que permita reducir esta diferencia".
Es importante señalar que la quinta entrega de los fondos europeos Next Generation está condicionada a una reforma fiscal que corrija esa brecha, aunque hasta ahora Hacienda consideraba que el ajuste estaba prácticamente completado tras reducir la diferencia entre la presión fiscal española y la europea de siete a tres puntos entre 2019 y 2023. Sin embargo, la reciente revisión al alza del PIB por parte del INE ha disminuido el peso relativo de la recaudación, lo que aumenta el reto pendiente.
En cuanto a las medidas concretas, Montero adelantó que el Gobierno llevará próximamente al Parlamento la propuesta de hacer permanentes los impuestos temporales a la banca y las empresas energéticas.