(El Confidencial, 16-12-2024) | Fiscal
En la antesala de la XXVII Conferencia de Presidentes, la primera en tres años, las perspectivas de alcanzar un consenso eran prácticamente nulas. Sin embargo, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, destacó la importancia de la "unidad territorial" que proyecta esta reunión con los líderes autonómicos, incluyendo al lehendakari, Imanol Pradales, y al presidente de Cataluña, Salvador Illa. Aunque Sánchez no presentó documentos previos a los mandatarios regionales para estructurar el encuentro, reservó un anuncio significativo que desató la controversia: en enero convocará un Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) con el objetivo de que el Estado asuma parte de la deuda de las comunidades autónomas, incorporando en esta medida el concierto catalán pactado con ERC durante las negociaciones de su investidura.
Sánchez aprovechó este foro multilateral para abordar la problemática de la financiación autonómica. Los presidentes autonómicos del PP se opusieron frontalmente a cualquier tipo de privilegio fiscal para Cataluña y defendieron la necesidad de evitar negociaciones bilaterales. En la misma línea se posicionaron los líderes socialistas, con Emiliano García-Page, presidente de Castilla-La Mancha, como uno de los más críticos hacia los acuerdos del Gobierno con el independentismo catalán. Salvador Illa, por su parte, subrayó: "Queremos un modelo de financiación solidario para toda España. No aceptaré lecciones de solidaridad de quienes fomentan la insolidaridad fiscal".
Cabe recordar que, hace casi un año, el Gobierno acordó con Oriol Junqueras condonar 15.000 millones de euros de la deuda de Cataluña con la Administración Central a cambio del apoyo de ERC a la investidura de Sánchez. Desde entonces, no se han ofrecido más detalles sobre cómo se concretará este alivio financiero. Según reveló El Confidencial, el Ejecutivo pretende utilizar esta condonación como herramienta para garantizar la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado y atraer tanto a ERC como a Junts.
Este anuncio, impulsado por las exigencias del independentismo catalán, reaviva el debate sobre la reforma del sistema de financiación autonómica, una cuestión que inquieta particularmente a las regiones con mayores niveles de endeudamiento, como la Comunidad Valenciana, Andalucía y Murcia, todas gobernadas por el PP. A este grupo se suma Castilla-La Mancha. En este contexto, Feijóo ha pedido a los presidentes autonómicos del PP evitar negociaciones bilaterales sobre la condonación de deuda, aunque algunas comunidades del partido estarían dispuestas a aceptar un alivio financiero siempre que se aplique de forma equitativa a todas las regiones.
Sánchez trasladó a los líderes autonómicos su compromiso de impulsar un "nuevo modelo de financiación" que combine multilateralidad y bilateralidad, siguiendo la línea planteada en el Congreso Federal del PSOE en Sevilla. Según el presidente, esta reforma debe garantizar la solidaridad entre territorios y aumentar los recursos que reciben las comunidades autónomas. Además, propuso reprogramar parte de los fondos europeos para crear una línea adicional de ayudas destinada a los territorios afectados por la DANA, especialmente la Comunidad Valenciana.