(El País, 17-02-2025) | Fiscal
La deuda de las comunidades autónomas ha crecido de manera vertiginosa desde la crisis financiera. Desde 2008, ha aumentado en aproximadamente 15 puntos porcentuales, alcanzando el 21% del PIB, un nivel muy superior al 13% establecido como objetivo en la Ley de Estabilidad Presupuestaria para el sector territorial. Reducirla hasta ese umbral requeriría un largo proceso acompañado de fuertes ajustes. Según el centro de estudios Fedea, para lograrlo en los próximos 10 o 20 años, las autonomías deberían generar un superávit primario anual de entre el 0,5% y el 0,1% del PIB, un escenario poco probable considerando la evolución histórica de sus presupuestos, especialmente en las regiones más endeudadas. Cataluña es la comunidad con mayor deuda en términos absolutos, y los independentistas de ERC han acordado con el PSOE una quita parcial, que se extendería al resto de los territorios. Sin embargo, la medida genera controversia entre los líderes autonómicos y será el tema central en la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera del 26 de febrero, donde participarán el Ministerio de Hacienda y los consejeros autonómicos.
El informe de Fedea, elaborado por el catedrático de Economía Diego Martínez López, señala que el objetivo es que las comunidades autónomas obtengan financiación de forma independiente en los mercados, sin depender del Estado como su principal prestamista. No obstante, advierte que los altos niveles de endeudamiento actuales representan un obstáculo para ello.
Para comprender la situación actual, es necesario remontarse a 2012, cuando el Tesoro puso en marcha los mecanismos extraordinarios de liquidez con el fin de auxiliar a las comunidades que no podían acceder a los mercados financieros. A través de estos préstamos, el Estado ha seguido proporcionando financiación a las autonomías a un coste más reducido. Regiones como Cataluña, Comunidad Valenciana, Murcia y Castilla-La Mancha han sido las principales beneficiarias de estos mecanismos y, en consecuencia, son las que actualmente tienen una mayor deuda con el Estado. En cambio, otras comunidades, como Madrid, que no han recurrido a estos préstamos, rechazan la propuesta de condonación pactada entre el Gobierno y Cataluña.
El acuerdo entre ERC y PSOE prevé la cancelación del 20% de la deuda de Cataluña con el Estado, lo que equivale a unos 15.000 millones de euros. Sin embargo, aún no se han concretado las cifras ni los porcentajes que podrían aplicarse al resto de las autonomías. Martínez López sugiere eliminar progresivamente los mecanismos extraordinarios de liquidez, ya que considera que el Estado no es un prestamista eficiente a medio y largo plazo para otras administraciones. No obstante, reconoce que suprimirlos de forma abrupta sería inviable para las comunidades con mayores dificultades financieras. Por ello, propone una transición gradual hacia la financiación en los mercados, acompañada de ciertas condiciones, como vincular la reestructuración o condonación de la deuda a ajustes fiscales específicos y avanzar en la reforma del sistema de financiación autonómica, una tarea pendiente desde hace más de una década.
El informe plantea varias alternativas a la condonación de deuda. Una opción sería reestructurarla mediante la ampliación de los plazos de amortización o la reducción de los tipos de interés. Otra posibilidad es establecer un periodo de carencia durante el cual solo se paguen los intereses, posponiendo el debate sobre una posible quita para más adelante. Por último, se menciona la condonación parcial de la deuda en manos del Estado a través de una transferencia de capital condicionada a su uso exclusivo para amortizar los préstamos objeto de condonación, lo que supondría el mayor coste para el Estado.
Por otro lado, el estudio descarta intervenir en la deuda de las comunidades que no tienen obligaciones pendientes con el Estado, como Madrid, ya que ello requeriría modificar la legislación vigente y podría generar una interferencia innecesaria en sus relaciones financieras con los mercados.