(La Razón, 12-12-2024) | Laboral
Los salarios de los empleados públicos experimentarán un nuevo incremento con la llegada de 2025, una medida diseñada para contrarrestar el impacto del aumento del costo de vida reflejado en los recientes datos de inflación acumulada. Este ajuste salarial se suma al incremento aplicado durante el pasado verano, cuando las nóminas de los funcionarios registraron un leve aumento. Además, el próximo año traerá consigo una sorpresa adicional que beneficiará a este colectivo.
En el verano de 2024, los trabajadores públicos disfrutaron de un aumento salarial del 2%, gracias a la decisión de la ministra de Hacienda y Administraciones Públicas, María Jesús Montero. Sin embargo, este incremento no será el último. A partir de 2025, se aplicará un aumento adicional del 0,5%, ya que la inflación acumulada entre 2022 y 2024 ha superado el 8%, tal como estaba previsto.
Según Montero, esta iniciativa reafirma el compromiso del Gobierno con los empleados públicos. La mejora salarial alcanzará a todos los trabajadores que dependen de la Administración, incluyendo el Estado, comunidades autónomas, corporaciones locales y empresas públicas. Además, los funcionarios recibirán un ingreso adicional correspondiente a la subida salarial del verano de 2024, que se aplicó con varios meses de retraso. Este pago extraordinario se abonará en enero de 2025.
Los atrasos que recibirán los funcionarios, dependiendo de su grupo profesional, serán los siguientes:
Grupo A1: aproximadamente 150 euros
Grupo A2: aproximadamente 130 euros
Grupo B: aproximadamente 110 euros
Grupo C1: aproximadamente 95 euros
Grupo C2: aproximadamente 80 euros
Aunque los salarios de los funcionarios estuvieron congelados durante varios años, a partir de 2016 comenzaron a incrementarse nuevamente, aunque en porcentajes menores a los actuales. En 2022, por ejemplo, se aprobó un aumento del 1,5% para mitigar los efectos de la inflación, sumado al 2% previsto en los Presupuestos Generales del Estado, resultando en un incremento total del 3,5% ese año. Estos ajustes reflejan un cambio significativo en las políticas salariales de los últimos años.