(Expansión, 10-03-2025) | Mercantil, civil y administrativo
Banco Central Europeo (BCE) para la publicación de sus proyecciones sobre la economía de la zona euro el próximo jueves, reflejarán con toda seguridad una mejora respecto a las previsiones que se hicieron en diciembre pasado para este año.
En aquel momento, los especialistas de la autoridad monetaria estimaban que el PIB crecería un 2,5% en 2025, lo que suponía una clara desaceleración en comparación con las cifras de 2024. Por su parte, BBVA y CaixaBank manejaban una previsión algo inferior, situándola en un 2,3%.
Como ocurrió con el resto de analistas, estas entidades también se sorprendieron cuando el INE informó que, en el último trimestre de 2024, el PIB se había mantenido estable en relación con el trimestre anterior y que, de manera provisional, se calculaba un crecimiento del 0,8%. Esto situaba el incremento anual de la economía en términos reales en un 3,2%.
Esta cifra llevó a que, casi de inmediato, las principales firmas de análisis admitieran que sus previsiones anteriores habían quedado desactualizadas. Uno de los factores clave fue el llamado efecto arrastre, lo que los llevó a anunciar revisiones al alza en sus estimaciones, aunque aún había que esperar para determinar en qué medida. A lo largo de esta semana, con los datos recientes de enero y febrero y considerando la incertidumbre que genera la situación geopolítica, tanto el Banco de España como BBVA oficializarán dichas revisiones al alza.
Si se aplicara directamente el dato del último trimestre, la estimación se vería incrementada en varias décimas. De hecho, el propio Gobierno ya tomó la iniciativa hace algunas semanas y ajustó su previsión desde el 2,4% registrado en septiembre hasta el 2,6% actual. Tanto el Banco de España como BBVA consideran que esta cifra encaja con sus nuevos cálculos e incluso dejan abierta la posibilidad de que pueda ser mayor. Un elemento que respalda una mayor aceleración del crecimiento es el comportamiento del empleo, medido a través del número de afiliados a la Seguridad Social en los primeros meses del año.
En enero, la afiliación ajustada por estacionalidad habría aumentado en unas 30.000 personas, mientras que los datos de febrero reflejan una clara aceleración, con un incremento de 59.000 nuevos afiliados, casi duplicando la cifra del mes anterior. Según cálculos del BBVA, también los datos de la primera quincena de febrero muestran esta tendencia.
Esto indicaría, según los expertos, que la actividad económica se mantendría dentro de un rango de crecimiento de entre seis y ocho décimas en el primer trimestre, lo que aseguraría que, para el conjunto del año, el PIB superará el 2,6%.
Con la información disponible, el indicador de crecimiento en tiempo real elaborado por la Airef sitúa actualmente la previsión en un 2,9%. Esta cifra también es respaldada por los modelos de predicción inmediata utilizados tanto por el Banco de España como por BBVA.