(Cinco Días, 11-12-2024) | Laboral
El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña ha emitido una sentencia que establece un precedente significativo en relación con los derechos laborales, al ratificar la legalidad del despido de un trabajador de Securitas Direct por hacer un uso indebido de la tarjeta restaurante proporcionada por la empresa durante una baja médica. Esta tarjeta, destinada exclusivamente a cubrir gastos de manutención en días laborales, fue utilizada por el empleado mientras estaba de baja por motivos de salud. Aunque el importe total del uso indebido fue de apenas 53,51 euros, el tribunal determinó que se produjo una violación de la buena fe y la lealtad contractual.
La empresa había entregado al empleado la tarjeta con condiciones claras de uso, las cuales este aceptó al firmar un documento que especificaba que el recurso era exclusivo para días laborables y dentro de horarios de trabajo, únicamente en establecimientos adheridos a una red de restaurantes. Sin embargo, tras sufrir un accidente laboral en mayo de 2023, que le ocasionó una baja temporal, el trabajador usó la tarjeta en seis ocasiones durante este período.
En consecuencia, fue despedido por incurrir en faltas relacionadas con la desobediencia y la transgresión de la buena fe contractual. El Juzgado de lo Social número 8 de Barcelona avaló la procedencia del despido en enero de 2024, y ahora el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña ha confirmado este fallo.
La resolución judicial rechaza los argumentos del empleado, quien alegaba una vulneración de sus derechos fundamentales y discriminación por su estado de salud. Los magistrados concluyeron que no hubo trato discriminatorio, sino una conducta probada de abuso de confianza y transgresión de las obligaciones contractuales al utilizar reiteradamente la tarjeta para fines no autorizados mientras estaba de baja.
Aunque el importe involucrado fue reducido, el tribunal señaló que este factor es "irrelevante". El motivo del despido no radica en la cantidad defraudada, sino en el acto de usar indebidamente un recurso proporcionado por la empresa para fines laborales. Según el fallo, el comportamiento del trabajador fue grave y careció de justificación, lo que justifica la proporcionalidad de la sanción aplicada. Por tanto, el despido fue considerado procedente y ajustado a las circunstancias del caso.